martes, 11 de mayo de 2010
BATALLA POR NUESTRAS VIDAS
Williamsburguer; 342 Wythe Ave / South second. (Brooklyn)
Al alba y con suave viento de Levante, nos topamos con un titánico monstruo de carne, con enormes tentáculos de bacon, afilados aros de cebolla y cien lenguas de queso. Un terror frío heló nuestros corazones y tuvimos la certeza de estar en presencia de la muerte misma.
Tras encomendarnos a todos los santos conocidos, atacamos con saña y furia a la bestia, convencidos de que moriríamos en el intento, pero alegres por librar la más épica de las batallas.
Con uñas y dientes peleamos, bravos guerreros de Brooklyn.
Cuando más flaqueaban las fuerzas y más cercana parecía la derrota, un ángel salvador, encarnado en una bella camarera, nos refrescó con una tonificante jarra de Budweiser, elixir que nos insufló ánimos suficientes para una última acometida. Y así, henchidos de orgullo, devoramos al Titán de Williamsburg y vencimos.
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5 comentarios:
Jesucristo Cazavampiros, yo antes que ingerir eso prefiero no comer, hay más calorías que en la nevera de Falete. Jarl y más jarl. Es normal que sufriéseis tanto intentando abarcar semejante construcción.
Koloke... como se entere tu jefe que traicionas la marca comiéndote eso, te vas de cabeza al paro...
sabes lo que es la envidía no??? ahora misma se a personificado en mi persona!! diooooooooooossssssssssss trae un poco de ese monstruo de carne pacá!!!!!
hambre hambre!!!!!
saludos!!! :)
Aitor, en este pais es ilegal contar calorias: incluso acarrea pena de muerte en algunos estados.
Carrascus, no es traicion sino investigacion. Hay que probarlo todo para buscar nuevas ideas.
Jah, ojala pudiera enviar unas cuantas por UPS: mandaria cientos, para tener reservas el resto del anio
¡Qué maravilla de hamburguesa cabrones!
Lala
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