Un consumidor muchas veces no sólo determina su acto de compra por el producto y su precio, sino por el servicio post-venta que espera encontrar.
Así, el saber que tendrá facilidades en caso de necesitar una reparación o, simplemente, el tener la posibilidad de cambiarlo si lo desea, pueden hacer que nos decantemos por una u otra marca.
El ejemplo paradigmático de un buen servicio post-venta lo encontramos en El Corte Inglés y su archiconocido "Si no queda satisfecho, le devolvemos su dinero".
Pero claro, no todo el mundo puede permitirse conceder estos lujos...
Foto tomada en el mercadillo de El Charco de la Pava de Sevilla
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